lunes, 21 de abril de 2008

En la lista de un fashion rebel… Vol. 1


Divagando….

Voy a hablar de Balenciaga simplemente porque desde que Nicolás, como le llamaremos cariñosamente sin conocerle y sin saber si es realmente “humano”, al igual que Coco Rocha, apareció en escena, los desfiles de la casa Balenciaga, del grupo Gucci, son diseño y lujo en su más pura expresión.

Pero no se trata de sus vestidos armadura o de su nueva forma de reinventar el sack dress, ni de sus zapatos gladiadores que se pierden en el background de una alfombra florecida. Ni de sus temporadas de primavera “llena de flores” ni de su “austero y maduro” otoño…Ni de sus chicas Oxford con shemags de las cuales cuelgan moneditas de metal, que por cierto ya estamos hartos de ver en todos lados, al mejor estilo Zara, H&M y mercadillos hippies….

Sino que desde hace 11 años, en la Casa Balenciaga, Ghesquière ha logrado marcar un sello, que hoy para muchos, y estoy de acuerdo, es la suma de todas las cosas, una colección igual a la otra, una misma idea cada seis meses… pero por ahí dicen que todo creador hace la misma obra una y otra vez…

¿Hasta cuando creen ustedes que dure la genialidad de Ghesquière? Me lo pregunto porque siempre es extraño cómo creamos íconos… y yo soy de las primeras que piensa que es un extraterrestre cada vez que saca una colección, aunque luego le oigo decir a la prensa: “I’m really happy to see the influence of the Balenciaga silhouette on the street.” Y me digo, ¡así que en realidad eres uno de nosotros sólo que con un golpe de genialidad!

Claro que esto no es lo que precisamente Jean Paul Gaultier piensa cuando, como todo ser humano, siente envidia… al saber que “Nicolasito” comenzó en su empresa llenando, fotocopiando y catalogando telas, y ahora él tiene que diseñar para Balenciaga las líneas de licencias, incluyendo uniformes de empresas y vestidos de novia para el Japón. ¡Claro esta! que Jean ya tuvo su momento de genialidad…

Actualmente, los que marcan las pautas de la moda son Nicolás y Miuccia; y es que no hay que ir muy lejos: Zara, MNG, H&M en menos de un mes lo tienen en sus tiendas, ¡Thanks God!!! para los pobres fashionistas que no podemos comprar un original de $46,000 a $86,000 dólares pieza.

Pero como decía al principio, lo valioso de Nicolás es que volvió el verdadero diseño, y no una simple tendencia, en lujo, entendiéndose el sablazo para Louis Vuitton by Marc y Gucci by Frida . Y como el mismo Nicolas Ghesquière lo dice en WWD. “You don’t know what’s going to be wearable—that’s the beauty of fashion.”

No hay comentarios: